En el año 2005, como consecuencia del egreso de 10 jóvenes con discapacidad de la Escuela Especial N° 10, un grupo de mamás comenzamos a gestionar el proyecto de lo que es hoy el “Taller Protegido Luz de Esperanza”, innaugurado el 8 de junio de dicho año.
Al año siguiente, el municipio de Catriel cede una vivienda del IPPV, la que se acondiciona y, posteriormente, amplía con recursos aportados por el Sindicato Jerárquico de Río Negro, Neuquén y La Pampa y un subsidio del Estado Nacional.
En los años subsiguientes se han ido incorporando nuevos operarios, egresados de la misma escuela, y se ha continuado con la mejora y la ampliación del taller y de las actividades productivas.
Este servicio de Fundación Nexos es posible gracias al acompañamiento de: